8/4/10

LA CIENCIA DE LA PAZ



LA CIENCIA DE LA PAZ

Paciencia y más paciencia
Chorreras de paciencia
Paciencia a la carta
Paciencia que equivale
A amor, que equivale
A vida, que equivale
A frutos que equivale
A paciencia.
Si es un esfuerzo
No hay amor,
No se quiere,
No se retroalimenta,
No es paciencia.
Si hay que buscarla
Es porque no se la tiene
Y si no se la tienen es porque
No se ama, por lo tanto
No hay paciencia.
La Biblia dice que el amor todo lo puede
Todo lo espera
Todo lo consuela
Todo lo soporta
Si no hay amor todo se transforma en nada
Nada de vida, nada de paz y menos paciencia.
La paciencia no se busca,
No se compra, no se vende,
No equivale a esfuerzo.
Cuando uno construye
Una relación con afecto,
La paciencia fluye sola,
No hay que buscarla.
Cuando uno construye
Una relación forzada,
Por conveniencia
Y no hay amor,
Por ende, no hay respeto,
Entonces la paciencia
Brilla por su ausencia.
Pero uno no puede querer de prepo
A uno a veces no le sale querer,
Entonces debe buscar en su
Memoria pasada
Uno de los más hermosos valores familiares
EL RESPETO.
Cuando se logra respetar al otro,
Sin criticarlo, la paciencia vuelve a fluir
Como torrente de agua clara.
¿Pero qué pasa si en la familia no se enseñó
A amar, respetar y menos a tener paciencia,
A través de sus ejemplos cotidianos?
Esa personita va a crecer
En este mundo
Cruel y despiadado
Sin paciencia
Y lleno de rencores;
Manejándose por conveniencia,
Sin respeto por el otro
Ni por sí mismo.
Crece en este mundo
Desconociendo el saber esperar.
Y corre el riesgo de abandonar
A mitad de camino o de vivir frustrado
Por lo que no logró.
Y lo peor de todo vive sin amor y
Sin amarse, que es lo más maravilloso.
Porque cuando uno se ama, se tiene paciencia
Y sabe esperarse.
Amarse + amar
Respetarse + respetar
Esperarse + esperar
Ayudarse + ayudar
=
P A C I E N C I A

(Este poema surgió de una charla de aula en 1° año de la Etn° 14 – 6 de abril de 2010)

Edith Tessari

1 comentario:

escuela de arte para maestros dijo...

mi paciencia...
espero que me encuentre
en el encuentro de un lejano mundo
mundo lejano
que sin otros que nos den la mano
mano amiga que nos despega de la rutina
rutina interminable
interminable llamada
llamada de mi madre
madre nunca encontrada
encuentro innecesario
innecesario al paso de los años
los años nos amigan
los amigos nos descubren
ubres de vacas sin leche
sin leche...
¿para qué?
Si no puedo alimentar...
alimenta ¿qué?
el amor
el amor de una vida
¿existe Dios si no existe la familia?
sí, existe Dios.